Desde casa

Hola a todos,
ya ha pasado la mitad de las vacaciones, ya he hecho la mitad de las cosas que me había propuesto para estos días:

ya he ido a la playa, al atlántico primero, a la playa del castro de Baroña, y al Cantábrico después, a Ribadesella, ya he estado en el fin del mundo, allí he comido pescado, navajas y bebido Ribeiro, también he visto un concierto de Queen en Santiago (se parecían un huevo) y me han enseñado un cantar que habla de lo que es emigrar:

Dígoche este adios chorando
desde a beiriña do mar.
Non me olvides, queridiña,
si morro de soidás...
tantas légoas mar adentro...
¡Miña casiña!,¡meu lar!

ya he vuelto al Sella, ya me he puesto mi chaleco, y el pañuelo y las ganas de bailar, y de bañarme en el río, y de cantar el Asturias Patria Querida, y de verles salir a todos, a los malos, y a los buenos.

Guarde el público silencio(bis)

y escuche nuestra palabra (bis)

De orden de Don Pelayo

después de medir las aguas,

presidiendo el dios Neptuno

los actos de esta olimpiada,

con las novias, los tritones,

el cañón, los centauros y Pialla,

nuevamente se autoriza, en Arriondas,

la carrera de piraguas.

Y ya he vuelto a casa, ya he disfrutado de todos, y echado de menos a los que no están. Ya he tomado el sol, ya he ido de fiesta, ya me he reído, mucho, y ya he comido de verdad. Ya he visto montañas, paredes de piedra por encima de mí, y ya me he quedado con las ganas de verlas por debajo.

En fin, que ya ha pasado la mitad de las vacaciones, y que ahora viene la segunda mitad, ya os contaré…

Un abrazo a todos, y mucho ánimo.